por Carlos Esteban Cana
Entrevista
que valoro de la periodista y editora Zenn Ramos a este servidor, para el
semanario La Voz Hispana de NY, en la sección "Oteando sobre Arte,
Cultura y Poesía". Publicada en la edición del 1 al 7 de enero de
2015. En esta versión que comparto
actualicé y simplifiqué algunas de mis respuestas por razones de espacio.
En
medio del torbellino
un
intento de vida
en el
gesto paulatino
que
mueve a recoger
los
fragmentos...
-Carlos
Esteban Cana
Zenn
Ramos: La Poesía sigue siendo el resumen de todo el
potencial creativo del hombre, después de Dios; por medio de ella se resuelven
conflictos, desequilibrios y se crea un equilibrio mágico o tal vez un mayor
balance. El Poeta se yergue ante el
Universo y lo desafía, y el Cosmos conspira. Esta semana comparto con un escritor,
comunicador y poeta puertorriqueño que posee alas en su voz y alcanza la vida
en esencia, hasta ver el Universo de pie junto al legado cultural de su
conquista social-cósmica: Carlos Esteban Cana.
Zenn
Ramos: ¿Cómo se produjo en ti la relación del académico, el
gestor y el poeta? ¿Pueden todos convivir sin afectarse?
Carlos
Esteban Cana: Antes el aprendiz de poeta fue tomando su lugar,
durante la adolescencia (aunque el poeta se desarrolló de manera formal mucho
después), y esa dimensión creativa dio paso, más que a un académico a una
persona que ama las humanidades. Y esto
por ese intento de aprehensión, tanto de la experiencia como del saber. Supongo que esa simbiosis me permite proceder
como alquimista en lo que ha gestión se refiere reconociendo esa
interdependencia que ha fluido…
Zenn
Ramos: ¿En qué momento sentiste la necesidad de expresar la
belleza y tu percepción cósmica, por primera vez?
Carlos Esteban
Cana: No preciso el momento particular en que esa
necesidad de apalabrar este asombro que es la vida se manifestó. Intuyo que se
ha tratado de un proceso paulatino…
Zenn
Ramos: ¿Cuándo escribes frecuentas un punto de partida o
sueles partir de cero?
Carlos
Esteban Cana: Cuando me acerco a la narrativa tengo un perfil más
claro de la historia que quiero contar, ese punto de partida. En poesía en ocasiones sucede lo contrario, y
el proceso, sinuoso por demás, inicia desde una ambigua emoción que se palpa en
el momento y se va desarrollando con la reescritura.
Zenn
Ramos: Si te pido que delimites tu perfil como escritor,
¿cuál es tu género preferido?
Carlos
Esteban Cana: Ese perfil ha sido mutable, tiene ciclos… Inicié con
la poesía, pero luego me vi atrapado o seducido por el gran poder que tiene el
cuento. Después de una década regresé ya
de manera más formal a la poesía, y en ese transcurso fui degustando el
microcuento, que aunque comparte la materia prima con el cuento tradicional
puedo asegurar que es otro universo, otro género.
Zenn
Ramos: ¿La literatura te ayuda a sentir arraigo o
pertenencia a un lugar?
Carlos
Esteban Cana: Sí. Entiendo más mi lugar en el mundo a través de la
literatura, tanto desde la creación como desde la lectura. Y eso dentro del
tiempo que me ha tocado vivir como Boricua, Caribeño, Latinoamericano y
Ciudadano de un Planeta cada vez más globalizado.
Zenn
Ramos: ¿Cuánto hay en tu narrativa de recorrido al azar y
cuánto de búsqueda de revelación?
Carlos
Esteban Cana: El proceso de crear mediante la narrativa, en mi
caso, ha tenido de ambas tendencias. Hay
unas historias que se han dado de forma aleatoria; otras, sin embargo, son
resultado de ese cauce natural y constante de hacer mías ciertas experiencias
de la vida a través de esa búsqueda.
Zenn
Ramos: ¿La poesía es un compromiso político-social o más
bien una forma de establecer tu realidad?
Carlos
Esteban Cana: Apalabrar mi realidad, ese intento de hacer alquimia
de mi tránsito por este milagro que es la vida, no se puede dar, es imposible
que se manifieste, si excluye la dimensión político-social concreta que he
experimentado como habitante del Archipiélago Borincano durante los últimos 50
años. Por lo tanto, esa realidad se
ramifica con el continuo intento vital de Ser y Proceder, aún con las luces y
sombras que me habitan. Es ineludible.
Zenn
Ramos: Pienso que la poesía exuda belleza y debe abarcar el
Todo Universal. ¿Cuánto del Cosmos domina, por así decirlo, tu registro
literario, y por qué?
Carlos Esteban Cana: Esa gran metáfora, por nombrar al Cosmos de alguna manera, ocupa una parte sustancial de lo que he ido desarrollando en los últimos años, tanto en narrativa como en algunos cuadernos poéticos. Este proceso creativo gana entonces cierta rigurosidad y complejidad por acercarse a una diversidad de disciplinas que van desde la filosofía a la historia, de la teología a la sociología, hasta saberes que emanan del estudio de la estructura del lenguaje o el manejo de la información por los medios de comunicación. Sucede que la chispa del motivo inicial se enhebra con la investigación.
Entonces en esa gran metáfora se manifiestan personajes, emociones y situaciones que tienen su génesis en esa búsqueda -ontológica podrían nombrarla algunos- que ineludiblemente se me presenta como amante de las Humanidades que en el transcurso intenta comprender mientras (y quizás como resultado), procede, gesta, camina...
Esa
experiencia ha sido una ruta no prefigurada como un juego de ajedrez. Sí ha sido, por momentos, sinuosa; en otros
instantes extraña, maravillosa o silenciosa. Pero es espontánea y se renueva cada día.
Detalle que siempre me recuerda aquellos famosos versos de Antonio Machado:
Caminante no hay camino/ se hace camino al andar...
Su periodismo cultural es reproducido en diversos espacios y bitácoras cibernéticas, con columnas como: Breves en la cartografía cultural; Aquí allá y en todas partes; Crónicas urbanas y el boletín En las letras, desde Puerto Rico, en bitácoras como Confesiones, Sólo Disparates, Panaceas y placebos, Boreales, Revista Isla Negra y en periódicos como El Post Antillano. Tiene tres libros publicados: Universos (micro-cuentos); Testamento (antología poética; una selección de 46 cuadernos) y Catarsis de maletas (cuentos). Actualmente reside en la ciudad de Nueva York y desarrolla la plataforma multi-mediática Servicios de Prensa Cultural. Para Carlos Esteban Cana profesar creación y cultura es como recibir oxígeno; vehículos que le permiten ejercer su libertad.